La limpieza con láser pulsado y de onda continua (CW) son dos enfoques distintos que se utilizan en las aplicaciones de limpieza con láser. La principal diferencia radica en cómo se entrega la energía láser a lo largo del tiempo. Aquí hay seis diferencias clave entre las aplicaciones de limpieza láser continua y pulsada:
1. Suministro de energía:
Onda continua (CW): en la limpieza con láser CW, se emite un flujo continuo y constante de energía láser a lo largo del tiempo. El rayo láser permanece encendido durante todo el proceso de limpieza.
Pulsado: La limpieza con láser pulsado proporciona energía láser en ráfagas o pulsos cortos. El rayo láser se enciende y apaga rápidamente durante el proceso de limpieza.
2.Potencia máxima:
Onda continua (CW): los láseres CW suelen tener una potencia máxima más baja en comparación con los láseres pulsados. La potencia media se reparte en el tiempo.
Pulsado: Los láseres pulsados pueden alcanzar potencias máximas más altas durante cada pulso, incluso si la potencia promedio es menor que la de un láser CW.
3. Interacción material:
Onda continua (CW): los láseres CW generalmente son más adecuados para aplicaciones de calefacción, como soldadura o tratamiento térmico, donde se requiere una fuente de calor constante.
Pulsado: Los láseres pulsados se utilizan a menudo para aplicaciones que requieren ráfagas de energía breves e intensas. Pueden ser más eficaces para eliminar contaminantes o revestimientos sin generar calor excesivo.
4. Eficiencia de limpieza:
Onda continua (CW): Los láseres CW pueden ser menos eficientes en algunas aplicaciones de limpieza, ya que el haz continuo puede provocar un calentamiento excesivo del material, provocando daños térmicos.
Pulsado: Los láseres pulsados suelen ser más eficientes para la limpieza, ya que los pulsos cortos pueden eliminar o eliminar contaminantes rápidamente sin calentar significativamente el sustrato.
5.Precisión:
Onda continua (CW): Los láseres CW pueden ser adecuados para aplicaciones donde la precisión no es crítica y es aceptable una aplicación de calor gradual y constante.
Pulsado: Los láseres pulsados ofrecen mejor control y precisión, lo que los hace adecuados para aplicaciones donde la eliminación precisa de material es esencial.
6.Seguridad:
Onda continua (CW): los láseres CW pueden presentar un mayor riesgo de acumulación de calor y posibles daños térmicos a los materiales si no se usan con cuidado.
Pulsado: Los láseres pulsados pueden ser más seguros en determinadas aplicaciones, ya que las breves ráfagas de energía minimizan el riesgo de daños relacionados con el calor.
La elección entre limpieza láser continua y pulsada depende de los requisitos específicos de la aplicación, incluido el tipo de material que se va a tratar, el nivel de precisión deseado y la posibilidad de daños relacionados con el calor. Cada enfoque tiene sus ventajas y desventajas, y la selección debe basarse en las características únicas de la tarea de limpieza en cuestión.